Yves Rocher es recolector, fabricante y distribuidor de productos cosméticos a base de plantas. Como única línea de conducta cree en el respeto por nuestro planeta y sus habitantes. Yves Rocher desde 1959, no ha cambiado sus valores y vuelve a escena con más fuerza: nuevo logotipo, nueva identidad, nuevas tiendas... Yves Rocher se reinventa. Y se reafirma más que nunca como Creador de la Cosmétique Végétale®.
El nuevo logotipo, en forma de sello, refleja la nueva identidad visual mediante las iniciales del fundador, que dibujan una planta en pleno crecimiento con tonos verde musgo y marrón tierra. Recuerda el poder de la marca en materia de Cosmétique Végétale®.
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Convertir los centros de belleza en un taller de Cosmétique Végétale®, es un nuevo compromiso hacia las mujeres. El taller es un lugar de conocimientos y experiencia, y simboliza también la nobleza del trabajo en su entorno cercano y acogedor.
Más que una tienda es un espacio donde se puede encontrar a profesionales que se tomarán el tiempo suficiente de escuchar, comprender y así orientar al cliente con mayor eficacia, tanto en productos como en tratamientos estéticos.
Y todo esto se resume en que Yves Rocher hace que la belleza sea accesible a todas las mujeres, cree en la “democratización de la cosmética”. Al gestionar cada etapa (recolección, fabricación y distribución), controla tanto los costes como la calidad de sus productos, con una única ambición: la belleza para todas las mujeres, sin excepción alguna.
Dentro del sistema de Franquicia, Yves Rocher cuenta con otra modalidad, "FyA" (Franquicia y arrendamiento) en la que el franquiciado explotará el negocio acondicionado por Yves Rocher, a cambio de un canon de uso.