El auge de las lavanderías autoservicio
Septiembre 2015 - La cadena de lavanderías La Wash inició su andadura hace tres años en Barcelona y ya cuenta con 51 establecimientos, tres de ellos en Portugal.
"Hay que seguir trabajando duro para escalar", afirma el gerente y fundador de la empresa, Xavier Llacuna.
El 30% de los locales son propios y los demás, franquiciados. La previsión para el año que viene es duplicar su presencia, ya que el modelo es fácil de replicar y les han hecho ofertas para abrir en varias ciudades españolas.
Llacuna llevaba años trabajando en una multinacional de gran consumo y conocía el sector del comercio cuando decidió embarcarse en el proyecto de La Wash. El perfil de sus clientes es diverso, desde familias numerosas que vuelven de viaje (necesitan poner muchas lavadoras y con sus servicios ahorran tiempo), negocios pequeños que hay en las proximidades y que necesitan lavar, hombres que viven solos... "Si sólo fueran turistas, no tendría la fuerza que tiene", asegura el fundador. Un establecimiento mediano registra unos cien ciclos de lavado al día. Sin el descuento que ofrecen las tarjetas de fidelización de la cadena, una colada en su lavadora más grande, de 18 kg, cuesta 7,5 euros, y una en la más pequeña, 4,5 euros con detergente incluido.