Diciembre de 2016. La franquicia de consumibles cuenta con un modelo de franquicia atractivo para los emprendedores y requiere de una inversión inicial de sólo 8.000 euros, cifra que resulta bastante inferior a la que piden otras marcas. Lo más destacable es que el asociado no necesita poseer o alquilar un local para desarrollar su actividad comercial, si no que le basta con tener una furgoneta, que le servirá tanto para desplazarse como para utilizarla como almacén.

Además, los asociados pueden recuperar la inversión inicial en un plazo de tiempo muy corto, ya que el modelo de franquicia que presenta Adlant es 2 en 1. Es decir, por un lado sus asociados se benefician por la venta de consumibles originales a sus clientes y por otro, la recogida de producto vacío para su posterior reciclaje también les aporta una gran cantidad de ingresos.

También hay que señalar que parte de la rápida recuperación de la inversión es gracias a que la franquicia se pone en marcha en muy poco tiempo, al no tener que esperar a reformar un local. En cuanto el asociado termina su formación en la central, puede iniciar su negocio.