"Ahora como franquiciado estoy más apoyado aún", afirma José Antonio Garrido García franquiciado de Cien Boca-Pizz
La franquicia de restauración se preocupa por mantener un contacto directo con sus franquiciados
Junio de 2017. José Antonio Garrido García, franquiciado de la firma Cien Boca-Pizz, nos comenta el motivo de convertirse en franquiciado y cuáles son las ventajas de hacerlo con esta marca.
¿Cuándo y por qué decidió unirse a la familia de Cien Boca-Pizz?
Ya llevaba dos años trabajando como encargado en uno de los locales de Badajoz donde realizaba funciones de jefe de sala, también había trabajado para la franquicia como responsable de formación de nuevos trabajadores y como apoyo y refuerzo de las nuevas aperturas en otras localidades. Conocía el negocio, la oferta comercial, sabía de primera mano los números que generaban y entonces me pregunté ¿y si monto mi propia franquicia? Fue entonces cuando decidí tener mi propio Cien Boca-Pizz.
¿Cómo está siendo su experiencia con el soporte y apoyo desde la central? ¿Qué destacaría?
La experiencia está siendo totalmente satisfactoria, como encargado tenía contacto permanente con la central, siempre están visitándote y ofreciéndose para ayudar, y tienen una respuesta inmediata ante cualquier duda o problema. Ahora como franquiciado estoy más apoyado aún, realizan informes mensuales de ventas y análisis trimestrales sobre los costes de mercadería, cuentan con mi opinión cuando se llevan a cabo promociones y están buscando siempre formas de incrementar la rentabilidad del negocio, como ahora con las pizzas de 30 cm. Lo que más destacaría sin duda es la cercanía de los profesionales que integran la central, prácticamente te tratan como si fueras de la familia.
¿Cómo se gestiona un establecimiento de estas características?
La operativa es muy sencilla y mecánica, no hace falta tener experiencia en hostelería, yo mismo he formado a muchos de los que ahora son trabajadores de otras franquicias y que no tenían ni tan si quiera las nociones básicas, y hoy día se defienden igual o incluso mejor que yo. La gestión en barra, al ser un modelo de autoservicio en el que el consumidor pide, paga y recoge tanto bebidas como comidas solamente exige estar pendiente de la atención al cliente y de que las mesas estén limpias y recogidas. En cocina la elaboración de la comida se hace muy amena ya que existen puestos definidos para cada función de forma que se coordinen de la mejor forma para dar un servicio rápido y de calidad.
¿Qué expectativas tiene al frente de este negocio?
Las expectativas que tengo son las de seguir creciendo como empresario, hoy estoy aquí, en la ciudad de Villanueva de la Serena donde ya son muchos los clientes que nos conocen y repiten. Como trabajador nunca pensé que ser franquiciado se me daría tan bien, tengo mucha ilusión por mi trabajo y eso al final repercute en el servicio que das al cliente. Además, mi objetivo es tener varios Cien Boca-Pizz en el futuro por lo que espero abrir dentro de poco mi segunda franquicia en Extremadura.
¿Recomendaría a otro emprendedor formar parte de Cien Boca-Pizz?
Por supuesto, aquel que se plantee emprender dentro del sector de la restauración y no lo tenga muy claro le recomiendo que conozca uno de nuestros locales y vea con sus propios ojos como funciona este negocio y a la cantidad de jóvenes y familias que atrae, estoy seguro que se decidirá a formar parte de esta gran familia.
Pero no solamente a emprendedores como yo que quieran crecer como empresarios, sino a trabajadores que estén buscando una oportunidad laboral. Muchos alucinan con el ambiente que se respira en nuestros locales, el buen ambiente entre compañeros y la simpatía que despertamos en el cliente.