Me uní al grupo en el año 2002 como peluquero, en el primer salón Franck Provost que se abrió en España en la calle Claudio Coello. A partir de ese momento, inicié una carrera profesional larga: entré en el grupo, más adelante empecé a participar en el proyecto de un nuevo salón, en 2014 fue cuando di el salto a emprender en solitario como asociado-franquiciado, y hasta día de hoy que tengo tres salones de las firmas Franck Frovost y Llongueras en Madrid.

Elegí Llongueras y Franck Provost básicamente porque empecé mi carrera profesional con ellas y siempre he estado interesado en crecer tanto como profesional como en hacerlo como empresario. Siempre quise dar este paso, solía ver la trayectoria del grupo y sus marcas Llongueras y Franck Provost, lo que crecen de año en año, y quise unirme a esta trayectoria.

Básicamente, más que una franquicia, quise crecer con el grupo con el que llevo trabajando muchos años y con el que me ha ido bien la vida.

Me interesó este sector desde siempre, siempre me gustó la moda, el mundo de la mujer, la belleza, la sensibilidad que tiene esta profesión y he querido seguir adelante y crecer con ella.  

¿Qué le aporta el grupo respecto a la competencia?

Me aporta imágenes corporativas de Llongueras y Franck Provost, material didáctico, nuestras propias colecciones, pero, sobre todo, es un gran soporte en gestión. Resuelven las dudas que surjan a lo largo de tu carrera y, además, ayuda mucho tener detrás una marca en la que confías. Los resultados hablan solos, es una gran ventaja y un gran soporte para mí.

La experiencia ha sido muy positiva, porque soy una persona a la que le gusta mucho soñar con nuevos proyectos, nuevas iniciativas. Tengo muchas inquietudes y es un grupo que está en permanente crecimiento y en el que me puedo fijar y aprender día a día.

La ventaja que he encontrado principalmente es la gestión, el soporte en la gestión. Soy peluquero, mi carga profesional ha venido a través de aprender la profesión desde abajo. El mundo empresarial es distinto y la marca me ha aportado mucho apoyo en este sentido y mucha tranquilidad.

Estamos en un momento de una incertidumbre brutal a nivel mundial. Lo que más valoro en estos momentos es el hecho de sentir que voy al lado de un grupo, que no camino solo. Que no voy remando en una pequeña barquita, sino que voy al lado de un barco gigante y me da mucha seguridad. Tengo mucho contacto con ellos y, la verdad, hace que me sienta en familia.

De cara a mis clientes me aporta mucho, desde pequeños detalles que hacen la visita al salón más cómoda a las clientas, hasta cosas importantes como la formación muy intensa que recibimos. Además de tener disponibilidad en los centros que el grupo tiene en Madrid y Barcelona durante todo el año, donde hacemos las colecciones, tenemos un acompañamiento continuo por parte de los departamentos de expansión, marketing y, sobre todo, de los responsables de formación que se encargan de reforzar y formar a mis equipos continuamente. Para mí eso es muy importante. También podemos hablar de todo el marketing que nos dan: redes sociales, revistas de moda… Me aporta bastante.

Tengo previsto abrir más negocios, estoy en ello, tengo ganas…

Recomendaría a otros emprendedores unirse al Grupo básicamente porque demuestra que está avanzando y solo hay que ver la trayectoria del grupo sin remontarse más allá de los últimos 5 años hasta el día de hoy. Simplemente con este dato te das cuenta de a dónde puedes llegar.

El grupo en estos momentos me ha ayudado mucho. Estamos en una situación totalmente excepcional con un nivel de incertidumbre como nunca he visto. Es un gran soporte tener un grupo detrás, que te canalice con sus estrategias, que ayude con las dudas que te asaltan día a día. Da mucha seguridad y mucha tranquilidad.